sábado, 21 de febrero de 2009

OTRO CATÓLICO EN EL HOLLYWOOD DORADO


Acabo de leer las conversaciones que Peter Bogdanovich mantuvo con Leo McCarey a lo largo de su último año de vida, que el veterano director pasó ingresado en un hospital de California aquejado de enfisema pulmonar. No solemos encontrarlo en las listas de los más grandes, y, de hecho, no solemos acordarnos de él. Pero creo que se merece un comentario, aunque sea uno pequeñito. Por muchas cosas: porque fue el "inventor" de El Gordo y el Flaco y firmó algunas de las mejores cintas de la encantadora pareja que formaron desde entonces Laurel y Hardy; porque dirigió Sopa de Ganso, quizá la mejor película de los Hermanos Marx; porque fue el auténtico descubridor de Cary Grant, el primero que le dio un papel importante, en La Pícara Puritana; porque hizo las dos Tú y Yo, la primera con Charles Boyer e Irene Dunne y la segunda (para mí la más conocida, cuánto buen cine nos hemos perdido por ser demasiado jóvenes, aunque también cuánto más cine hemos podido disfrutar por la misma razón) con Cary Grant y Deborah Kerr, uno de los más claros exponentes de la comedia romántica al estilo de Hollywood, que nos hizo disfrutar por sí misma y, de postre, a través de los ojos de Meg Ryan en El Desvelado de Seattle (a la que por fin decidieron titular en español Algo para recordar, misterios de los traductores); porque Frank Capra le rindió un claro homenaje en Qué bello es vivir, donde podemos ver que en el cine de la ciudad dan una peli de McCarey;  y porque era católico. Lo fue toda su vida y nos dejó sendas (y oscarizadas) muestras de ello en dos de sus películas más recordadas, Siguiendo mi Camino y Las Campanas de Santa María, en las que Bing Crosby, solo o acompañado por Ingrid Bergman, conseguía que el pueblo americano en pleno simpatizara de inmediato con los curas católicos. 
Así que propongo una revisión de alguna película de McCarey cuando Michael O'Leary vuelva de Oriente Medio.

2 comentarios:

Michael O'Leary dijo...

¿También era un borrachín?

remington steel dijo...

No, creo que este no. Capra tampoco lo era, y eran muy buenos amigos.